Hoy, a las 8:00, estaban en la gasolinera J.M. Asturiano con su coche escoba, M. Güidi, J.A. Gentile, P. Telecom, E. Chozas, M. Vinokourov, J.M. Piépoli, J. Rominger y M. Er Dergao. En La Cala se unirían, además, J.R. Escartín, J.A. Zabel y P. Lejarreta. En la gasolinera M. Güidi reparte las crónicas anteriores a los que no son "cibergloberos". Esta es una labor de M. Güidi que, como muchas otras, él realiza por el 22x28. Además confiesa estar enfermo pero, sin embargo, está allí como buen globero y esto es otra cosa que hace que el grupo sea grupo... saber que siempre habrá unos cuantos globeros al pie del maure.

Se notan ausencias que, en otro tiempo, no se habrían perdido este tipo de salidas ya que son las que más le gustan ... las muy duras. Y La Corta aunque es corta en distancia, es larga, muy larga en dureza. Rampas superiores al 17 % aquí y allá harían 'las delicias' de los globeros.

A las 8:15, viendo que nadie mas vendría, comienzan la salida y se dirigen a La Cala, comienzo del disfrute. Como decía, al principio de La Cala estaban Escartín, Zabel y Lejarreta que se unen. Nada mas llegar al comienzo de la pitanza se encuentran con los aperitivos y comienzan a oírse los crujidos de cambios, 11 globeros cambiando platos y piñones al mismo tiempo montan un escándalo único. Dos rampitas, la primera con 200 metros al 18 %, 200 al 11 y 200 al 13 y la siguiente, mas corta, con 400 metros al 7% seguidos de 200 al 14% hacen que los élite Chozas, Zabel, Escartín y Lejarreta las engullan muy rápido, el autobús le dedica el tiempo que cree conveniente y Rominger, sin embargo, se dedica a saborearlas.

El autobús se mantiene unido siempre por muy duras que fueran las rampas. Cuando llegan a la subida a Totalán, catalogada como el almuerzo de la pitanza, el mal estado de la carretera, que está en obras, y la fuerte subida 13, 12, 7, 14 y 11% cada una de 200 metros hacen que algunos tengan que bajarse de la burra ya que la rueda trasera pierde el agarre y algún que otro élite tuvo serios problemas con sus bicis de carretera. Chozas y Zabel habían confesado haberse machacado el sábado, no deberían estar para muchos trotes. A partir de este punto comienzan a darse hachazos los élite. Mas atrás, Güidi interroga a Er Dergao sobre donde buscaba esas salidas tan "adornadas". Er Dergao afirma que él quiere dar gusto a todos y que por lo tanto de vez en cuando hay que hacer alguna ruta dura para el disfrute de algunos. A esto, Gentile asegura estar pasándoselo pipa.

Durante la subida a Olías, Escartín da un hachazo y Zabel y Lejarreta intentan seguirle quedando mas atrás Chozas afilando su hacha, no le quedaba otra, de momento. Poco después Escartín baja el ritmo y es alcanzado por Zabel y Lejarreta. Al llegar a Olías, Escartín y Lejarreta usan tácticas globeras de equipo, primero ataca Lejarreta y más tarde le sigue Escartín quedando Zabel atrás al que además se le sale la cadena ¡mamones!. Chozas alcanza a Zabel. Mientras tanto, mas atrás el autobús continúa unido hasta las proximidades de Olías y, cuando falta poco para llegar, Gentile decide endurecer la subida y comienza a tirar fuerte, Güidi le sigue, Er Dergao no se queda atrás y Telecom decide también participar en el hachazo. Mientras, Piépoli y Vinokourov alucinan viendo semejante gansada a sabiendas que, poco más arriba, les espera el postre. Al llegar a Olías, Güidi y Gentile deciden cambiar el postre por un café y darse media vuelta. El resto se reagrupa, sigue y como era de esperar ... allí estaba el postre "El dilema de Jalabert" (otros le llamaban el despatarre de Jalabert) con una primera rampa de 200 metros al 15% y una segunda al 16% que tras los kilómetros de ascenso recorridos y las alegrías realizadas prometía ser todo un deleite globero. Se saboreó con sosiego para no perderse el más mínimo bufido pero nadie perdió los papeles. Mientras, mas atrás, Gentile y Güidi intentan convencer a Rominger para que se volviera con ellos pero Rominger, haciendo acopio de voluntad, decide seguir ¡esto es un globero!.

Mas adelante Chozas está a punto de alcanzar a Escartín y Lejarreta pero éstos le propinan un par de hachazos mas, siendo esto definitivo. Mientras tanto Zabel parece estar "pájara" o algo sobreentrenado, el caso es que no andaba como suele hacerlo él. Sobre las 10:25 llegaron Escartín y Lejarreta a 'La Reina', se tomaron un refresco y volvieron a Venta Galwey. Primero encontraron a Zabel que, con su pájarilla, siguió camino para su sede deportiva. Chozas había parado a chacharear con Asturiano, ya volvía y también continuó para Málaga por La Reina. Escartín y Lejarreta se tomaron otro refresco en Venta Galwey esperando al autobús pero viendo que no llegaba nadie volvieron hasta la carretera de Olías y no encontrando a nadie e ignorando lo que había ocurrido volvieron hasta La Reina y descendieron hasta Málaga

Mientras tanto el autobús había llegado al desvío a Colmenar y lo tomaron pero cuando habían avanzado unos 4 kilómetros apareció Asturiano, con el coche escoba, para informar que los élite habían seguido camino de Málaga y ya no estaban en la zona de abocatamientos, eran las 10:30. Con esta noticia y habiendo subido la parte mas dura ya no tenía objeto seguir hasta La Reina de modo que se dieron media vuelta. Telecom, que tenía que asistir a una comunión, se dirigió con Asturiano hacia La Cala buscando a Rominger y encontrándolo después de haber pasado el "dilema de Jalabert" y casi llegando al desvío a Colmenar. Piépoli, Vinokourov y Er Dergao decidieron regresar por Comares.

Los tres siguieron juntos todo el recorrido e hicieron un alto en las Ventas de Comares donde se abocataron disfrutando del "ambiente frutal" y desde allí se intentó localizar al Padre Pior por si le apetecía salir al encuentro disfrutando el ascenso por el Salto del Negro pero el intento fracasó. Tras el alto, comenzaron el ascenso a Comares donde se quejaron de haberse enfriado demasiado pero no había prisa. Después se hizo un rápido descenso hasta el Salto del Negro donde pudieron observar como el viento soplaba fuerte y en contra. Al llegar abajo aun quedaban algunas rampitas que los tres subieron escalando y se aumentó bastante el ritmo hasta hacer una segunda parada en El Trapiche. Al reanudar la marcha, con el viento en contra, se hacía casi imposible pasar de 22 o 23 km./h rodando la mayoría del tiempo a 21. Al llegar a Torre del Mar, como era de esperar, mucho mas viento en contra y, como es natural, esto hace que continúen al mismo ritmo y dándose relevos ¡que buenos!. Al llegar al desvío de Cajiz se comenzaba a interrogar los kilómetros que aun faltaban ... se estaba haciendo larga. Al final llegan al Rincón sobre las 14:30 con 86 kilómetros durillos recorridos y una media de 16,5 km./h. Según información facilitada por el SIGET, los tres tuvieron UVI.

 


Manuel García Casado