Detalles de la ruta en este enlace

Hoy domingo, 7 de Junio, aparecieron en el punto de partida: S. Olano, Fignon, Angel EPO, P. Indurain, E. Ullrich, J. Jalabert, P. Tonkov, J. Bugno, C. Iopuchi, Er Dergao y un invitado. Según algunos hoy había poco autobús y mucha élite. Pero es verdad que cuando está en el calendario La Pared aparece mas personal.

Primero se realizó un calentamiento a no mas de 18 km./h hasta la autovía y a partir de allí las velocidades fueron oscilando entre los 22 y los 26 km./h. Bugno, como siempre, saltó para despegarse del grupo pero esta vez, transcurridos unos 5 km. se dejó caer para ponerse a rueda de Er Dergao que, como siempre, iba poniendo la marcha al grupo. Bugno no volvió a menearse de esa posición hasta el fin del calentamiento, los motivos solo los sabe él.

A Torre del Mar se llegó con una media de 24 km./h y al tomar el desvío a Vélez se bajó algo la velocidad pero no excesivamente y nos abandonó el invitado. Al llegar al desvío a Triana, Er Dergao se deja caer hasta la cola ya que, él consideraba, que su labor ya había terminado, con tanta élite que tiren ellos.

A Benamargosa el autobús llegó sobre las 9h 45m. con una velocidad media superior a los 23 km./h y tras el reagrupamiento se comenzó el ascenso al Alto de Cutar formándose algunos grupitos: Ullrich, Jalabert y Olano eran seguidos a cierta distancia por Bugno. Tras ellos Fignon e Iopuchi y después el autobús totalmente desagrupado encabezado por Tonkov al que seguían P. Indurain, A. EPO, y muy descolgado M. Er Dergao. Con estas mismas posiciones se llegó al Alto de Cutar. El autobús llegó con una media algo superior a los 20 km./h.

Tras la reagrupación en El Borge se comienza el ascenso del terror de los globeros "La Pared". Aquí no hubo muchas sorpresas y llegaron: Fignon, Ullrich, Jalabert, Olano, Bugno, Iopuchi, EPO, Tonkov, Er Dergao y P. Indurain.

La velocidad de esta salida fue en cabeza de 21 km./h y en cola de 19 km./h y todos han valorado esta salida como muy buena donde nadie ha llegado a esforzarse excesivamente.

 


Manuel García Casado